Roma! Voy a vivir en Roma! No me lo puedo creer... Desembarcamos del barco con una maleta cada uno. Entonces él, pide un taxi que es el que nos llevará hasta el piso. Debo tener cara de tonta, porque todo cuanto me rodea me impresiona. Me siento como una niña, cuando por reyes le regalan juguetes nuevos. Entonces, después de un buen rato dando vueltas, el taxi para en una callecita donde hay un bloque de pisos.
- Es ahí. No es muy lujoso, pero está bien.
- Es mejor que nada de lo que podría haber conseguido yo, en un día. Muchas gracias por todo Lucca.
- Ya me has dado las gracias 6 veces contando esta, Vamos?
- Sí. Y gracias...- Le digo mientras le guiño un ojo...
Lucca le enseña al taxista un carnet, y este le dice que no hace falta que pague. Supongo que es algo así como el carnet jove. Bajamos del taxi y nos dirigimos hacia el bloque. Entonces, Lucca habre la puerta del piso.
- ¿Que te parece?
Una vez mas, con cara de tonta. Es increíble. Es pequeño, con una bonita decoración y muebles de madera. Es tan... perfecto.
- Vaaaaaaya! es precioso! parece mas cutre, porfuera! Me encanta!
- Ven! que te lo enseño!
Lucca me coge del brazo a la altura de la muñeca y me arrastra tras de él, para enseñarme el piso. Entre risas, me lleva a un tour por el pisito, hasta que me doy cuenta de que...
- Lucca, solo hay una habitación.
Él con una sonrisa pícara contesta:
- Sí... pero si no confías en mi yo dormiré en el sofá.
- De eso nada, yo duermo en el sofá y tu en tu cama! Ya has hecho suficiente por mí como para que encima, no puedas descansar bien por mi culpa.
- Mariona, es un sofá... No una cama de pinchos.
- O me haces caso, o me voy.
Entonces me mira y sonríe.
- Está bien, tu ganas. ¿Que te parece si vamos a dar una vuelta, y comemos algo?
- Como tú quieras... Pero un momento, que primero cojo mi cámara.
- Oh dios, ¿no me digas que la catalana es fotógrafa?
- Pues si Italiano, sí. Y además soy de las buenas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario